Después de completar el tratamiento, debes reunirte con tu equipo de oncología para comprender qué tan exitoso fue el tratamiento, prepararte para cualquier efecto secundario persistente y hacer un plan de seguimiento. Aquí hay algunas preguntas que puedes hacerle a tu oncólogo para tener toda la información que necesitas para adaptarse a la vida después del cáncer.

• ¿Qué tipo de atención debo esperar ahora que finalizó el tratamiento? ¿Supervisará alguien diferente mi cuidado ahora que el tratamiento ha terminado?
• ¿Cuál es la probabilidad de que mi cáncer regrese? ¿Estoy en mayor riesgo de desarrollar otro cáncer ahora?
• ¿Qué síntomas, efectos secundarios o efectos tardíos debo esperar? ¿Cuánto tiempo debo asumir que continuarán? ¿Debería preocuparme por alguno de ellos o comunicarlo? ¿A quién llamo si noto estos síntomas?
• ¿A quién debo ver para recibir seguimiento médico? ¿Con qué frecuencia?
• ¿Qué registros debo llevar sobre mi tratamiento? ¿Hay un resumen del tratamiento que pueda tener para mostrar a futuros médicos?

Tu seguimiento médico puede ser supervisado por profesionales médicos dentro de tu equipo de oncología, o puedes encontrar un médico diferente para administrar tu seguimiento, como un médico de atención primaria o un médico que se especialice en seguimiento médico del cáncer. No importa a quién veas, hay preguntas importantes que necesitas discutir con ellos. Asegúrate de compartir el resumen de tu tratamiento de tu oncólogo con el médico que dará seguimiento para que todos estén en la misma página sobre tu diagnóstico, tratamiento y pronóstico. En general, puedes esperar ver a tu médico de seguimiento cada 3 o 4 meses durante los primeros 2 o 3 años después del tratamiento. Esto disminuirá a 1-2 visitas por año después de eso.

• ¿Cuánto tiempo me llevará sentirme mejor y como yo mismo?
• ¿Experimentaré problemas de salud a largo plazo como resultado de mi cáncer y su tratamiento?
• ¿Cómo puedo estar lo más saludable posible para reducir mi riesgo de recurrencia?
• ¿Necesito tomar algún medicamento especial o seguir una dieta específica?
• ¿Qué pruebas necesito ahora? ¿Con qué frecuencia debo hacerme la prueba?
• ¿Debo preocuparme por los síntomas, los efectos secundarios a largo plazo o los efectos tardíos o debo comunicarlos a mi médico?
• ¿Qué registros debo llevar sobre mi tratamiento?
• ¿Hay algún grupo de apoyo que me recomiende? ¿Hay otros servicios que recomendaría para mí o mi familia?

Lo creas o no, aún necesitas ir a tu médico de atención primaria para las citas de rutina. Debes compartir con ellos tu diagnóstico y pronóstico de cáncer, o compartir la documentación de tu plan de tratamiento con ellos, para que puedan estar atentos a cualquier señal de advertencia de que tu cáncer ha regresado. Y no te olvides de completar tus exámenes de detección de cáncer de rutina para el cáncer de mama, cervical, colorrectal, de pulmón y/o de piel.

Puede que no parezca necesario, pero todos los médicos que veas desde el diagnóstico de cáncer hasta el resto de tu vida deben saber sobre tu diagnóstico, tratamiento y pronóstico. El cáncer afecta seriamente el cuerpo, por lo que incluso visitar a un fisioterapeuta o ginecólogo podría verse afectado por tu experiencia con el cáncer. Puedes elegir cuánto deseas compartir con cualquier médico futuro, pero ten en cuenta lo importante que es tu historial de salud completo para comprender tu salud holística.